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19 de octubre de 2021

HosMet recibe oficialmente mural del proyecto “El Arte de Sanar”

“El arte es un fármaco que sana el alma”. Así definió la Directora del Hospital Metropolitano, la doctora Margarita Samamé, la importancia del proyecto “El Arte de Sanar”, desarrollado por la Corporación 3xi y que, en el caso de nuestro recinto, nos benefició con la donación de una obra del reconocido ilustrador chileno Francisco Olea, que engalana nuestro hall central.

La pieza fue entregada oficialmente por el Director Ejecutivo de la corporación, Camilo Herrera, quien en una sencilla ceremonia explicó que la idea del proyecto, que incluye otras nueve piezas en recintos asistenciales, es “destacar el tremendo rol que cumplieron los funcionarios de salud en esta pandemia, donde se convirtieron sin quererlo en nuestros nuevos héroes”.

“Gracias por su trabajo, gracias por su esfuerzo”, apuntó el personero.

Unas palabras compartidas por el autor de la obra, Francisco Olea, más conocido en redes sociales como @oleismos, quien definió el llamado a participar en este proyecto como “algo caído del cielo”, pues “en redes había intentado expresar mi agradecimiento a los profesionales de la salud de alguna forma y esto cuajó en el momento justo”.

Explicó que visualizó el mural como la expresión agradecida de los millones de chilenos que, de alguna u otra forma, tienen algo que agradecer hacia quienes enfrentaron en la primera línea a la pandemia, con una mirada “positiva, con alegría e incluyéndolos a todos, abuelitos, los niños e incluso a las mascotas. Esa fue mi inspiración”.

La enfermera supervisora Karla Ábalos agradeció en nombre de los funcionarios del HosMet, recordando los difíciles momentos vividos, sobre todo, en los momentos más álgidos de la pandemia: “Cada día llegábamos a nuestro hospital dispuestos a transmitir fuerzas y ánimos a nuestros pacientes, más allá de nuestros propios miedos”.

“Sólo nos quedaba transmitir fuerzas a través de los ojos, porque era la única parte del cuerpo que se nos veía. A tal punto que hasta hemos aprendido a comunicarnos a través de las miradas, las cuales quedarán guardadas en nuestra piel”, afirmó.

La profesional agregó que “nada de lo logrado habría sido posible sin el compromiso de cada miembro del equipo de salud. Cada eslabón de esta compleja y valiosa cadena. No habría sido posible, sin la voluntad y el tesón de cada uno. Fue en esta época donde entendimos mejor que nunca por qué elegimos el camino de cuidar y salvar la vida de nuestros pacientes”.

La doctora Margarita Samamé, en tanto, cerró la ceremonia recordando los difíciles comienzos del Metropolitano y cómo el hospital fue creciendo en medio de las vicisitudes, logrando atender a más de 2.600 pacientes con COVID-19 desde Arica a Punta Arenas. “Por eso, agradezco este regalo tan hermoso en nombre de todos nuestros funcionarios, así como también de los pacientes y sus familiares que pasarán en el futuro por nuestro hall”, recalcó.